El microcemento o pavimento
continuo y pulido, es un alisado de cemento de 2 mm de espesor que se puede
aplicar en todo tipo de superficies, incluso sobre las ya existentes. Es un
material que no requiere juntas, ya que se trata de una superficie continua,
lisa y pulida.
Limpieza
previa a la aplicación
Las labores de limpieza son muy importantes
antes de su aplicación ya que requieren un alto grado de limpieza del soporte a cubrir.
Las labores de limpieza previa se deben centrar en eliminar cualquier residuo sólido
en la superficie para asegurar la planimetría que favorece siempre un correcto
acabado.
Limpieza
de mantenimiento
Es aconsejable siempre la limpieza de
superficies de microcemento con agua y jabones neutros, que tengan su Ph entre
6 y 9.
De forma periódica se deben fregar las
superficies (fregona habitual) o mopa húmeda impregnada con ceras
autobrillantes diluidas en agua que sirvan para conservar las capas
superficiales con las que se finaliza el proceso de instalación y contribuyen
de forma decisiva a su conservación, aspecto y durabilidad.
La limpieza de microcemento con tratamiento
antideslizante de realiza de igual forma, esto es agua y jabón neutro.
Nunca
limpiar con ...
El microcemento por su composición cementicia
y polimérica no tolera el contacto con sustancias ácidas o líquidos solventes
es por ello que las limpiezas enérgicas con productos agresivos están limitadas.
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